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 A
pesar de su enrevesado título, La maldición del
escorpión de jade no es la enésima película
de uno de los clones de Indiana Jones, sino la nueva comedia del
director neoyorquino Woody Allen. En ella, el autor de Annie
Hall recrea un ambiente, el del Nueva York de los años
40, que siempre le ha fascinado, como ya demostró, aunque
desde un punto de vista muy diferente, en Días de radio.
La maldición del escorpión de
jade narra la historia de CW Briggs (Woody Allen), un investigador
de seguros con un alto concepto de sí mismo cuyo empleo
se ve amenazado cuando entra en la compañía Betty
Ann Fitzgerald (Helen Hunt), encargada de mejorar la eficiencia
de la firma. En vano trata Briggs de convencerla de su talento,
que reside en entrar en la mente de los criminales; por el contrario,
sus problemas comienzan cuando la mente de un criminal realmente
entra en la suya gracias a los poderes hipnóticos del temible
escorpión de jade.
En su nueva película Woody Allen da otra
vuelta de tuerca sobre el tema de la hipnosis, que tanto obsesionó
a los americanos en los años 40. "Nunca me han hipnotizado,
y no es un tema que me preocupe; era sólo una premisa divertida,
y el resto de la película es lo que deriva de ella",
explica el director neoyorquino.
Lo que deriva de ella, obviamente, es una comedia
alocada muy en la línea de las últimas películas
de Woody Allen, como Granujas de medio pelo, Celebrity
o Todos dicen "I Love You". Además,
supone la segunda colaboración del director de Manhattan
con Dreamworks, estudio que también producirá sus
dos siguientes comedias.
Como en ocasiones anteriores, Woody Allen ha contado
en La maldición del escorpión de jade con
un reparto lleno de actores conocidos, que han aceptado rebajar
sus cachés para trabajar con él. Además de
la oscarizada Helen Hunt (Mejor imposible), colaboran por
primera vez con Allen Dan Aykroyd, al que actualmente podemos
ver en Pearl Harbor y Evolution, y Elisabeth Berkeley,
conocida por su papel en la teleserie "Salvados por la campana".
 Junto
a ellos, podemos ver a algunos de los rostros que se están
haciendo habituales en la filmografía de Woody Allen, como
Brian Markinson, Wallace Shawn o David Ogden Stiers. Otra que
repite es Charlize Theron, que ya tuvo un pequeño papel
en Celebrity, quien interpreta a una joven rica y malcriada.
La actriz explica: "Woody me dijo 'Si hiciera esta película
en los 40, el papel sería para Lauren Bacall, ¿te
interesa?'. Y, claro, ¿quién podría resistirse
a ser Lauren Bacall?".
Tras la cámara están también
muchos de los que han acompañado al autor neoyorquino a
lo largo de su carrera. Entre ellos se encuentra el director de
fotografía Zhao Fei, el diseñador de producción
Santo Loquasto, la montadora Alisa Lepselter y la encargada de
vestuario Suzanne McCabe.
La maldición del escorpión de
jade se estrena en Estados Unidos el próximo 10 de
agosto. Mientras, Woody Allen ultima la que será su próxima
película, que, como suele ser habitual, aún no tiene
título y en la que han participado Tea Leoni y otra antigua
protagonista de "Salvados por la campana", Tiffany-Amber
Thiesen.
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