Ficha técnica

 

 


Mulholland Drive

La vida en sueños

Por Javier Pulido Samper

"Si pudiera explicar algo coherente acerca de mis sueños no necesitaría plasmarlos en películas". 20 años separan esta afirmación de Mulholland Drive, la última creación de David Lynch. Una larga y coherente trayectoria en la que el realizador ha construido un universo propio y reconocible que le asemeja a otros grandes outsiders como Cronemberg, y en un sentido más comercial, Burton. Los adictos al cine de Lynch se sintieron parcialmente defraudados con el insólito requiebro que supuso Carretera perdida, producción en la que las líneas narrativas fragmentadas se diluían en humo en una de las propuestas más débiles del realizador.

Tras una conmovedora y emotiva historia (Una historia verdadera) que supuso la antitesis del anterior título, y que casi rozaba la parodia de las road movies se presenta la última obra de Lynch, precisamente con una secuencia que podría haber figurado sin problemas en Carretera perdida, unos faros de coche iluminando una carretera, a la que rodea la oscuridad. Que se llame así la película no es gratuito, Mulholland Drive es la carretera que conduce de Hollywood a Santa Mónica, un trayecto con giros inesperados y peligrosos que requiere estar muy atentos a todo cuando sucede. Quien espere encontrar una historia lineal se puede ir olvidando.

Y es que Mulholland Drive es un misterio que no quiere ser resuelto, un escapada oscura de alto voltaje que necesita ser experimentada y no explicada y que, en el caso de tener sentido para el propio Lynch, él mismo probablemente preferiría que no lo tuviera para el resto de la humanidad. Lo cierto es que, a pesar de que se puedan utilizar un gran número de explicaciones para lo que sucede en esta esquizofrénica historia acerca del negocio del cine y sus miserias, todas ellas podrían estar confundidas. Esto no sucede así porque la teoría no pueda cubrir adecuadamente los puntos de vista de Lynch, sus enlaces entre realidad y sueños, sino porque el director prefiere que las imágenes vayan más allá de la lógica para evocar estados de ánimo.

De otra forma, Lynch construye un artefacto que pretende ser en las formas una historia de Hollywood convencional, pero que discurre por los senderos más inexplicables. En la película de Lynch, que podría verse perfectamente desde el final hasta el principio como sucediera en Memento, el leitmotiv duerme oculto en la forma de decir y hacer de unos personajes que, como en los sueños que consiguen recordarse, cambian de cara constantemente, asumen diferentes roles y tejen una red que atrapa durante las dos horas y media de una película en la que nada hay gratuito. Al final, más allá de toda explicación lógica, se tiene la sensación de haber visto cine en estado puro .

Mulholland Drive contiene todos los elementos de un drama de Hollywood al uso, pero lo que en definitiva pretende es la creación de un sentido indefinible de desazón solamente experimentado por aquellos que permanecen atrapados en sus sueños. Respaldado por sus habituales (Jack Fish como diseñador de producción, Angelo Badalamenti musicando las imágenes) y con unas actrices que rayan la perfección (Naomi Watts y Laura Elena Harring), Lynch ha conseguido dar sentido a su propia clase particular de sueños imposibles.

Y es que Lynch ha vuelto con fuerza para demostrar que su imaginería, lejos de agotarse, se puede ampliar hasta donde él quiera. Así, en el plano formal Lynch vuelve a su estilo fragmentado de personajes imposibles, de sueños premonitorios y sueños que no se realizan, de objetos inanimados que infunden terror y abismos inenarrables que se filtran por las rendijas de lo cotidiano. En el fondo se trata, además de una de las más atrevidas historias de amor de su director, de una película sobre sueños y sueños rotos y un homenaje a uno de los sueños que con más facilidad se hace añicos... Hollywood. Guste o no, la mayoría de las situaciones que ocurren en Mulholland Drive, como esa estremecedora versión de "Crying" de Roy Orbison en español, no significan nada en un sentido convencional del término, pero son inolvidables, y esta es exactamente su finalidad.

 

Histórico de críticas de cine

Coloca cinestrenos entre tus favoritos

Suscríbete a la
lista de correo
  Nombre:
   
  E-mail:
   
   Estrenos
   Novedades
   Televisión

Foro de discusión

Enlaces

 

  Sobre cinestrenos.com     Publicidad     Contacta con nosotros     Sugerencias
© Cinestrenos.com 2003. Todos los derechos reservados.